Estuve 'ocupada', por así decirlo, los días que pasaron y no pude escribir nada. Paso a contar: el sábado fui a cenar a Free Pizza con mis amigas ( no les recomiendo ir, muy buena la pizza y todo eso pero te atienden para el culo, no hay espacio y entre porción y porción de pizza tenes como 20 min) y después me pasó a buscar Flechu y nos fuimos a un cumpleaños. El domingo que hice? sinceramente ni me acuerdo jaja. El lunes fue un día común y corriente en el que tuve arte y saben qué? me puso un 6 la flaca. UN SEISSSSS ! no puedo tener baja arte, no. Sólo porque no entregué el último trabajo y me puso un uno. Dios mio. Ese mismo día fui con mi mamá a Ugarte a comprar un vestido para una fiesta de 15 y una remera re linda que vi a $20 y no la compré esa vez. Cómo me equivoqué así? Tendría que haber pensado que si no la compraba esa vez alguien me la iba a robar, o no? Bueno, fue así. Cuando la voy a comprar ya no estaba. Maldito sea la persona que me la robó. Me probé un par de remeras más a ver si me quedaban bien y, por desgracia, ninguna me iba bien. Todas al cuerpo. Todas mostrando el fucking cuerpo que dios me dió. Cuando YO tenga una línea de ropa voy a hacer todas las remeras olgadas, todas sueltas. Acaso no piensan en las personas que padecemos de una gran porción de grasa pegada en la cadera? Nadieee?. Buen, dejando de lado mi frustración por mi cuerpo, paso a contar que mi queridísima madre me dijo cuando estabamos en el colectivo que ella sabía dónde quedaba el local al que yo quería ir para comprarme el vestido. Pero no, finalmente no tenía ni la más puta idea de donde quedaba. Gracias. Cuando daba por perdída mi valiosa vida, entré al local que estaba al lado del que entré primero y me puse a ver si encontraba alguna remera blanca, simple. Tan difícil es encontrar una remera blanca básica? Eso parece. Porque, después de probarme treinta y cinco remeras, me decididí por una que no me convence del todo pero bueno, es lo que hay. La compré con mi enorme cara de culo y ya que estaba ahí quería fijarme si no había una pollera que me quiero comprar para el verano. Y de repente, como si Dios hubiera tenido piedad, vi un vestido que me decía: Comprame Belén, comprame! ( que mal tenía que estar para pensar eso ). Finalmente me lo probé y me lo compré. El precio ayudó mucho, gracias a dios. Y salí del local con una mínima felicidad interior. Aleluya ! El martes, o sea, ayer fui a unicenter con Jennifer y Agustina a acompañarla a Jen a comprar un regalo, de paso me tome un Frappé, qué vida. Y aca estoy, es miércoles, no tuve colegio y todavía no almorzé. Acabo de hablar con 'mi tía' para arreglar cuándo puedo ir a su peluquería para que me ponga extenciones, great.